Elección

Desperté en un oasis. El raciocinio me faltaba, mi respiración se sentía entrecortada, miré a mi alrededor: no había nada más que un desierto genuino.
Los cactus y sus espinas me asediaban, decían que querían ser como yo. Poder tener la capacidad de sentir, de tocar, de mirar, en fin, de ser.
No se imaginan lo difícil que es ser.
Simplemente ser.
Yo los envidio, carecen de emociones.
De un momento a otro, percibo que aquel desierto se ha convertido en un laberinto.
Aquellos cactus que parecían inofensivos eligieron no seguirlo siendo y comenzaron su cruel seguimiento; se convirtieron en un laberinto.
Ahí comenzó mi elección. Pues el desierto se convirtió en un laberinto sin fin. Veía una cantidad de opciones a elegir, pero ninguna parecía la correcta. Seguí mi camino, encaminándome por diversas entradas. Veía más espinas, crecían ante mi. Se proliferaban a medida que avanzaba.
No hay salida, pensé...

Capacidad

Suena mi canción favorita. Pienso que la vida no es tan mala como parece.
Termina de reproducirse. Vuelvo a entrar en depresión.
Me miro al espejo, sonrío. Veo fuerzas.
Salgo a la calle. Veo que el sol resplandece, quema mi piel, me hace sudar.
Siento.
Por lo menos aún tengo sensibilidad; entonces no me he muerto.
Sigo con vida, por lo menos lo agradeceré.
Esta carrera no acabará, hasta que yo misma acabe con ella. Hasta que logre llegar a la meta, al final, hasta que logre terminar el ciclo.
No hay excusas para no seguir, solo mis acciones.
Siento otra vez, pero esta vez creo que ya no tengo capacidad.
Que el vaso ha rebasado su tope y yo, dentro de él.
No existe un camino hacia atrás, existe un camino recto, derecho, hacia adelante; pero yo no lo veo.
Camino.
Me canso nuevamente, me caigo nuevamente.
¿Qué más puedo pensar?
Es un camino infinito, el camino de la vida. Si no pudiera lidiar con esto, entonces no tendría capacidad para vivir. Me creo incapaz en algunos instantes, instantes efímeros, instantes duraderos, instantes infinitos; en fin, instantes de todo tipo.
Pienso.
Todo esto es la secuela de mis pensamientos, de mis acciones, de mis lamentos.
Y si, no fuera por esto, entonces yo creo que no tendría la capacidad para recitar estos versos...

Nocivo

Nos adherimos fielmente a los ideales de amor que habíamos experimentado sin percatarnos que teníamos una prueba nueva ante nuestros ojos.

Las bombas de tiempo van contrarreloj, quedan solo instantes.

Habrá una explosión.

Un estallido de hormonas se apodera de nuestros cuerpos.

El deseo es efímero, pero a la vez es constante.

La inhalación es similar; es nocivo hacerlo también.

Siento placer y quiero continuar, pero la vida se desvanece en el tiempo...

También, el tiempo se va desvaneciendo con la vida.

Arena

El tiempo, pasa como una tormenta de arena.
Los minutos, desaparecen como ventiscas arenosas en el desierto de sus pensamientos.
Entre sus dedos se encuentra la oportunidad de deshacerse fácilmente de aquellas partículas minúsculas enlazadas con su destino: recuerdos.
Ella contempla el cielo esperando alguna respuesta, una señal.
Las nubes se entrelazan entre sí formando un movimiento que se devela al unísono de sus pensamientos; lentos pero en sincronía.

Los contempla, pero no los entiende.
Los observa, pero no los tiene.
Los siente, pero no existen; definitivamente.

Ilusiones que van y vienen.

Vivir

Estoy en el lugar indicado, pienso.

Estoy donde debería estar.

Me merezco todo esto.

Nadie me hará sentir mejor, que mi misma persona.

No puedo evitar haber llegado acá, el destino me toma de su mano y me explica brevemente que necesito seguir inmiscuyéndome en esta cruel realidad a pesar que yo misma crea que no tengo la capacidad para lidiar con ello.

Estoy preparada, lo sé. En mis pensamientos tengo en claro que puedo.

Me niego.

No es justo, pienso también.

Nadie debería afrontar dichas situaciones, son complicadas y difíciles, pero así es la vida. Tengo que continuar en contra de cualquier adversidad que se me presente porque yo sé que puedo lidiar en su contra. Puedo vencer toda aquella batalla que necesite combatir.

Es extraño llegar a un punto en el que estos momentos de dudosa procedencia, nos asedian. Nos confunden y nos llevan a pensar hasta en la misma muerte.

¿Miedo a la muerte? O ¿Miedo a vivir? 

Secuencial

No es posible alterar la secuencia de los hechos...
Pienso en instantes anteriores y comprendo que en realidad, quizás algo impidió que alguna otra cosa sucediera por el simple hecho de entender y aprender de la razón de lo primero.

Me adentro en una especie de jardín
Mi cuerpo estaba decayendo lentamente
Se debía a mi imaginación perturbada
Pero como producto de aquellas películas de terror
que solía ver por falta de sueño
en las madrugadas.

La incertidumbre que un acto a futuro provoca, es incesante.
Pensé en un sinfín de posibilidades al momento de ejecutar aquel acto
Sin embargo, insistí.
Las circunstancias en el momento impidieron que lograra adentrarme en lo desconocido;
Indiscutiblemente, por una razón.
Ahora, entiendo el porqué del primer fallo:
No debía insistir.

Reflejo

Supongo que cada una de las acciones que llevamos a cabo a lo largo de nuestra vida, tiene y/o tendrá alguna repercusión. 

La vida es un entero círculo paradójico que debemos recorrer pretendiendo que sea una línea recta. 

Entonces, el reflejo de nuestras acciones acechará en nuestra mente por tiempo indeterminado... 

Y la verdad es que todos los factores están destinados entre sí. No existe manera de explicarlo, pero todo posee su razón de ser. 

Notar algunos reflejos del pasado representándose en un lugar inhóspito y en un pensamiento inesperado es de esperarse gracias a las vueltas inusuales del universo...

Pérdida

El entorno que me rodea, siempre será el mismo.

Pensamientos emergen sin precedentes; mi mente es un pozo sin fondo de donde afloran algunas reflexiones que debería tener en cuenta sobre la vida en sí.

La confusión me agobia y se une a mi incertidumbre, juntas, forman aquellas extrañas nubes de humo que inconscientemente voy atravesando a medida que me adentro a la realidad.

Me encuentro perdida en un mundo irreconocible...

Y la realidad, puede ser confusa. Se puede notar algo tensa y difusa, sin embargo, sé que he creado esto bajo mis propios medios.

Mis pensamientos lograron instaurarlas en mi ser.

Las nubes que veo se inmiscuyen en mis sentidos haciéndome alucinar y a su vez, dudar un poco de su existencia.

A medida que avanzo, noto la pérdida de mis sentidos. Aquellas nubes, indudablemente contenían alguna sustancia que provocó en mí, un estado de somnolencia absoluta. Mi intención siempre fue continuar, pero ahora, solo me siento perdida...

No sé donde me encuentro.

No sé la razón de estar aquí.

No sé porqué cree este mundo.

No sé porqué decidí aceptar esto.